Si te apasionan las historias de los videojuegos entonces de seguro Revenant Dogma te gustará
La pasada Pax West 2018 fue una feria en la que muchas compañías japonesas vieron la oportunidad de anunciar nuevos títulos para consolas y PC. Entre estas compañías se encuentra Kemco Games quien participó anunciando la llegada de su título Revenant Dogma a las consolas. Pero no se trata del debut del juego ya que éste mismo había aterrizado, hace ya bastante tiempo, en los dispositivos móviles. Es solo que Kemco Games quiso llevar el videojuego a nuevas plataformas y a continuación veremos qué tal está.
Revenant Dogma es un videojuego indie del género JRPG que llegó a Xbox One hace poco. En principio nos encontramos con un menú de inicio sencillo y manejable, una interfaz con un toque japonés que, a decir verdad, decora la simplicidad de ésta. No obstante, el juego se encuentra en inglés por lo cual puede ser un problema navegar por el menú si no conoces conceptos básicos o más del idioma. Ahora bien, desde esta pantalla podremos iniciar una nueva partida, cargar o también continuar una que previamente hayamos empezado y acceder también a las opciones las cuales están un poco limitadas e impiden una personalización más amplia del juego.
Tras empezar a jugar es normal observar como en casi todos los videojuegos una cinemática de introducción a la historia. Aquí nos ponemos específicamente en la piel de Caine, un chico que se adentra en unas mazmorras en compañía de cuatro compañeros, dos de los cuales se unirán en el camino, para ir en busca de una antigua reliquia para cumplir así con la misión asignada por las Revenant Corps. La historia se torna interesante a medida que avanzamos y por supuesto le da sentido a la acción que se nos ofrece, pero hay algo que puede llegar a incomodar y es el hecho de que si bien la historia es extensa, los diálogos entre los personajes son bastante largos. Está claro que todas las conversaciones dentro de un videojuego son importantes y más aún si las llevan a cabo los personajes principales, es por ello que posiblemente no sea un problema encontrarse con diálogos de larga duración pero llega un punto en el que solo provoca presionar el botón (A) tantas veces como sea necesario para omitir las enormes charlas. A pesar de ello es una bonita historia que sin duda dan ganas de conocerla hasta el final.
Al momento de movernos con nuestro personaje es sencillo, podemos emplear el stick izquierdo o la cruceta de dirección para desplazarnos. Los escenarios son amplios y diversos, estos están acondicionados especialmente para la exploración, un elemento que tenemos asegurado dentro del juego. Aunque hemos de estar al tanto pues el combate puede llegar en cualquier momento. Por otro lado, interactuar con el medio tampoco es complicado, solo basta con acercarnos y presionar el botón (A) ya sea con objetos u otros personajes con los cuales iniciaremos nuevas misiones u obtendremos nuevas características y demás.
Tal y como había comentado anteriormente, el combate en Revenant Dogma llega inesperadamente. Desde el principio no hay cinemática o mensaje alguno que dé lugar a una batalla, lo único que nos alerta es un rayo de luz que cubre la pantalla y nos traslada a un zona en donde se lleva a cabo un combate por turnos en 3D. El combate en sí deja mucho que desear ya que no contamos con un amplio catálogo de habilidades y poderes para cada personaje a pesar de que este se mejore o se cambie. Si queremos un combate variado podemos entonces cambiar de personaje y así acudir a los ataques de cada uno; tengamos en cuenta que contamos con 5 personajes jugables para el combate pero sólo uno para la exploración.
Los enemigos tampoco son muy diversos y en varias ocasiones nos enfrentaremos a las mismas criaturas, dependiendo eso sí, del escenario en el que nos encontremos. Pero ese no es precisamente un gran aspecto en contra sino que el hecho de que los combates llegan inesperadamente en muchas ocasiones hacen que las batallas sean monótonas y repetitivas al punto de ser aburridas. Salvo a los combates contra jefes los cuales, por cierto, no representan un gran desafío.
En cuanto al apartado visual el juego cuenta con bonitos escenarios, sin duda es un pixel art que da gusto conocer y que además es cuidadoso con los ambientes exteriores e interiores bien sea dentro de una estructura o una caverna. Ahora pasemos a un plano diferente y es que las arenas de combate no son lo más relevante o atractivo del juego, me atrevería a decir que estos escenarios fueron un poco descuidados, la falta de detalles y ambiente en ellos refuerzan lo repetitivo y aburrido que pueden ser las batallas.
Y es que no solo los combates pueden llegar a ser monótonos sino también la música del del juego. Antes que nada me permito aclarar que los diferentes sonidos que se aprecian en el juego mejoran el ambiente, no obstante la música resulta bastante genérica y en ocasiones se llega a pensar que se ha escuchado la misma música todo el tiempo y no precisamente por su melodía sino las pocas variaciones que tiene.
En conclusión: Dentro de la orbe de Revenant Dogma nos encontraremos con una buen y cautivador argumento el cual, si somos pacientes, lo disfrutaremos por completo. Un mundo extenso y misterioso nos motivará a explorar cada uno de sus lugares, a esto le sumamos lo bastante sencillo que es movilizarnos. No serán épicos y lamentablemente tampoco serán tan variados los combates que nos ofrece el juego; visualmente no serán lo más atractivo. Pero aún así, la esencia de los clásicos JRPG no se ha extraviado en el juego.