Los coches de juguete se reúnen en circuitos juveniles
Super Toy Cars se trata de un título de carreras donde los coches de juguete serán los principales protagonistas. Conduciremos desde furgonetas hasta 4X4 en circuitos hechos totalmente de juguete, aunque el objetivo no sólo será el de ganar, sino el de despedazar al resto de contrincantes conforme conduzcamos hacia la meta. Sin más, arranquemos motores y pongamos cuerda a nuestros juguetes con este análisis.
Circuitos, coches…¡la batalla ha comenzado!
Desde que Super Toy Cars hiciera su aparición en Wii U y PC, ahora llega la versión para Xbox One. El título desarrollado por Eclipse Games llega con contenidos justos en cuanto a modos de juego se refiere. Podremos, eso si, aprender a conducir estos cochecitos a través de un completo tutorial que nos enseñará a familiarizanos con el control de nuestro vehículo, aunque lo cierto es que el control es bastante arcade por lo que no será necesario demasiadas horas de aprendizaje.
Y es precisamente en el control donde Super Toy Cars flojea, pues tendremos un botón para acelerar, otro para frenar y otro para lanzar objetos que vayamos adquiriendo durante la carrera, al más puro estilo Mario Kart. Quizás esta capacidad de juego es lo más destacado del título, pues las carreras se hacen bastante amenas y alternativas dentro de la simulación arcade del juego.
Podremos manejar un total de 16 vehículos de clase y forma diferentes, cada cual con su propia forma de conducir y de manejar. Los vehículos están fielmente recreados cuales juguetes fueran, aunque el nivel de detalle en cuanto a texturas se refiere es algo pobre para tratarse de un título de Xbox One. Los coches son claramente diferentes entre sí, aunque estadísticamente hablando no parece que haya diferencias cualitativas en la velocidad, frenado o aceleración, pues a pesar de ser distintos en arquitectura y forma de conducir, carecen de diferencias en las cualidades del vehículo.
Además tendremos cinco modos de juego distintos, incluyendo un modo multijugador para cuatro jugadores offline y ocho jugadores online. Los dos modos de juego principales son el modo carrera y el modo carrera rápida. En el primero de ellos deberemos de superar una serie de desafíos que tendremos que ir completando para progresar y desbloquear nuevas pruebas y nuevos escenarios.
No sólo de conducir va la cosa
Pese a que Super Toy Cars es un juego de conducción, la cualidad principal será el de destrozar a nuestros rivales mientras conducimos por los circuitos. Podremos recoger ciertos objetos a partir de los cuales, en función de qué tipo sea, lo lanzaremos a nuestro contrincante más cercano. Un ejemplo es cuando obtenemos la pintura deslizante, la cual al ser lanzada podremos provocar que el rival resbale y pierda unos segundos valiosos.
Podremos además mejorar nuestro coche, teniéndonos que preocupar para encontrar el equilibrio perfecto y preciso para que la carrera no se nos haga una cuesta arriba.
En lo que respecta a la música, ésta es demasiado repetitiva y poco selectiva en cuanto a contenido respecta.