Análisis de Hitman (Prólogo y primer capítulo)

Hitman, la nueva entrega de la saga dividida en capítulos, ya está a la venta y en Comunidad Xbox te contamos nuestras impresiones.

El Agente 47 vuelve a sus andadas en la actual generación de consolas, manteniendo unas mecánicas vistas ya en anteriores juegos, pero adentrándose en el fanganoso y delicado mundo de los juegos episódicos. Hitman, sin ninguna enumeración numérica ni “apellido” que lo acompañe, pretender renovar la marca, comenzando su andadura con el primer capítulo descargable, compuesto por el prólogo y una misión (la cual ya pudimos ver en ferias del año pasado), y que seguro que no dejará a nadie indiferente. Entra en el mundo de los asesinatos.

Square-Enix ha sido la encargada junto con IO Interactive de reiniciar una franquicia, como ya lo hizo en su día Tomb Raider, saga que volvió a erigirse como una de las mejores aventuras gracias al cambio de propuesta llevada a cabo por los chicos de Crystal Dinamics. En esta ocasión y para el “reboot” de Hitman, se ha recurrido al recurso fácil: amnesia. Nuestro enigmático Agente 47 se verá envuelto en una serie de pruebas reclutorias en las instalaciones del ICA 20 años atrás respecto a lo vivido en el anterior juego, Hitman: Absolution,y que servirán como fases de entrenamiento en el título que analizamos hoy. Una vez hayamos pasado estos niveles a modo tutorial, nos enfrentaremos a la fase más grande que hayamos visto nunca en cualquier juego del famoso asesino. Showstopper, que así se llama la misión localizada en una mansión parisina, nos permitirá afrontar el asesinato de muchísimas maneras. Pero no adelantemos acontecimientos, vayamos poco a poco…

Los que ya jugaron en su día a Hitman: Absolution (título que recomiendo encarecidamente que juguéis, por cierto) verán muchas similitudes en esta nueva entrega. El Agente 47 seguirá siendo tan cauteloso como siempre, y volverá a hacer uso de sus habilidades en el engaño y despiste para alcanzar su meta. Lo mejor para pasar inadvertidos será el uso de los disfraces para pasar por zonas inaccesibles de otra manera, o manipular fusibles o cajas de luz para despistar a los guardias, incluso buscar rutas alternativas por tejados, tuberías y conductos. En Hitman todo vale con tal de que no seamos detectados y que logremos alcanzar nuestro objetivo. Tampoco faltarán las armas, algunas convencionales y clásicas ya en la franquicia como la pistola silenciadora o el cable de fibra, pasando por venenos, inyecciones letales o munición pesada con rifles de asaltos y bombas. Sin olvidar, por supuesto, de las “trampas” que existen en cada fase, ya sea ahogando a nuestra víctima en un retrete, electrocutándolo con un proyector o tirándole una lámpara en la cabeza.

Como veis, todo está a nuestro alcance para alcanzar el éxito en la misión, pero no siempre será fácil. Las zonas estarán plagadas de guardias o civiles que pueden ser testigos de nuestras fechorías, por lo que tendremos que pensar cual, cómo y dónde es el mejor momento para poner en marcha nuestros maquiavélicos planes. En este nuevo comienzo de Hitman, todo está bastante accesible, y pronto se nos ocurrirán mil ideas para deshacernos de nuestros objetivos. Por comenzar a explicar brevemente el contenido del juego, por ejemplo en la primera fase de entrenamiento nos ubican en un yate donde se celebra una fiesta, y donde tendremos que burlar la seguridad en cada planta, ya sea a base de disfraces o pasando inadvertido por caminos alternativos. La segunda parte del tutorial, ubicada en una base militar soviética, nos abre la mente con las múltiples opciones para asesinar a nuestro objetivo. Podremos desajustar la seguridad del asiento eyectable de un caza para que justo cuando nuestro objetivo se monte en el avión  conozca las imperfecciones del techo del hangar, electrocutarlo como dije anteriormente con el proyector (en mi partida ni lo electrocuté yo mismo, otro oficial se puso a toquetear los cables con la mala fortuna que provocó la muerte de su compatriota), y otras múltiples maneras que tendremos que investigar.

Aunque, como cabe de esperar, la joya de la corono se la lleva París, con esa espectacular mansión donde tendremos que asesinar a dos miembros de la corporación IAGO, una red de espías que con su información altera el transcurso de los acontecimientos mundiales. Sería imposible enumerar las diferentes formas que tendremos para afrontar la misión. Para empezar existen cuatro o más maneras de entrar en la mansión, lo que refleja el buen hacer del estudio en la libertad de elecciones dependiendo de cada jugador y su estilo. En un evento de moda, rodeado de gente, pasarelas, zona de maquillaje, salones privados y áticos abandonados, no sabremos ni cómo empezar. Cuatro plantas a cada cual más espectacular por todos los elementos decorativos que las conforman, y que podremos usar para nuestro propio beneficio.

Una vez acabadas estas misiones del primer contenido descargable, la cosa no acaba ahí ya que siempre podremos rejugar las fases completando una serie de desafíos (algunos imposibles) que alargarán enormemente la vida del título. Algunos de estos requerirán asesinar a nuestra víctima de una forma predeterminada, explorar alguna zona concreta del mapeado, o bien superar hitos, como pueden ser desfilar en la pasarela o servir de guardaespaldas de nuestro objetivo por un tiempo (si, este tipo de locuras tendremos que hacer en Hitman). Estos desafíos, que ya los experimentamos en Hitman: Absolution, no serán completados en vano, sino que nos ofrecerán cierta cantidad de experiencia una vez acabada la fase y que nos desbloquearán nuevos trajes, armas o puntos de entrada donde comenzar el nivel.

Lo que no nos convence mucho son los modos de juego adicionales que explicaremos a continuación. El primero es la Creación de Contratos, en los cuales marcaremos y asesinaremos a un total de cinco enemigos dentro de una misma fase para retar a otros jugadores y ver si ellos pueden lograr repetir nuestra hazaña. Modo de juego bastante básico y que sólo cumple la función de alargar la vida del título, aunque de una manera bastante mediocre. El otro modo es Intensificación, donde cumpliremos contratos propuestos por el juego, pero usando un arma y disfraz concretos. A medida que vayamos superando estos niveles de Intensificación, los contratos se irán volviendo más difíciles, por lo que esta modalidad será un poco más interesante por el factor desafío que la envuelve. Al fin y al cabo, estos modos están para lo que están: rellenar el vacío que encontraremos hasta que salga el segundo episodio de Hitman. Una espera que puede ser muy larga, y donde preferiremos matar el tiempo (o asesinar, ahora que hablamos del Agente 47) directamente con otros juegos antes que en caer en la reiteración de misiones cambiando el objetivo a eliminar.

Gráficamente cumple bastante bien, y no precisamente en el modelado de personajes, ni siquiera en el mismo agente 47. La mayor proeza en este apartado es la cantidad de objetos, NPC´s y detalles que encontramos en cada sala, sin tiempos de carga entre habitación y habitación. (Eso sí, que no os maten porque volver a cargar el escenario entero llega a ser deseperante). Lo comprobé en una partida donde ya estaba desquiciado por matar a mi objetivo, y tiré de subfusil a tiro limpio para acabar con su vida. En ese preciso instante, cientos de personas (y cuando digo a cientos, de verdad me refiero a cientos) empezaron a correr desesperadamente hacia la salida, lo que me sirvió como camuflaje y estupenda forma de escapar de la mansión en París. Todo esto nos da un ejemplo de la capacidad gráfica que ofrece Hitman, que no busca una recreación hiperrealista y perfecta, sino que prefiere la abundancia de elementos y escenarios ricos en detalle.

Y por último, y no por ello menos importante, nos queda el apartado sonoro. Será indispensable estar atentos a los efectos de sonido que se escuchen a nuestro alrededor, pues nos alertarán de posibles enemigos en la zona (aunque también contaremos con un providencial instinto de asesino, que nos permitirá ver a las personas a través de las paredes y de esa manera localizar mejor a nuestro blanco). La música nos envuelve cuando nos tiene que envolver, cuando la ocasión lo requiere o cuando hay tensión palpable. Por el resto, solo echar en falta voces en español, ya que, aunque el juego viene traducido en nuestro idioma, se pierden detalles en conversaciones secundarias por no venir dobladas.

¿Conviene adquirir este primer capítulo?

Sería difícil contestar a esta pregunta, y variará dependiendo de lo cercano que estes a esta franquicia. Por mi parte, aun no se conoce mucho de una historia que no ofrece nada relevante, y si no contamos las misiones de entrenamiento, sólo tenemos una fase donde poner a prueba todo lo aprendido con anterioridad. Un juego episódico se elabora de esa manera para, una vez acabado el primer capítulo, tengas unas ganas locas de jugar el segundo. Y eso, con Hitman y la historia que nos presentan, no pasa.

¿Interesado en este reinicio de la saga Hitman?