Las puertas se rebelan contra las injusticias que proporcionan los SWAT en Door Kickers: Action Squad. ¡Basta ya de tantos abusos y golpes sin motivo aparente!
Un agente especial es entrenado para reducir a los enemigos sin ser alertados. Está instruido con muchas estrategias de combate y maniobras complejas para que no haya bajas civiles. Sabe manejar a la perfección montones de armas, dispositivos tácticos y granadas de cualquier ámbito. Pero lo mas importante, sabe elegir bien una buena suela para sus botas con las que patear puertas. Sí, eso es verdad al menos en Door Kickers: Action Squad, la última propuesta jugable del estudio KillHouse Games, quienes se aventuran con un título directo, frenético y especialmente entretenido si lo juegas en cooperativo. Bienvenido a una versión de los SWAT un tanto particular.
Door Kickers: Action Squad no busca una trama relacionada ni con mafiosos, ni terroristas, ni nada por el estilo. Buscando una faceta completamente arcade, deberemos escoger el agente especial que más se adapte a nuestro estilo de juego y empezar a salvar rehenes, reventar a los enemigos y a patear puertas, por supuesto. A nuestra disposición tendremos seis variedades diferentes de agentes para enfrentarnos a los terroristas que campan a sus anchas por los edificios. Podremos elegir entre asalto, derribo, escudo, agente Fergie, rastreo o policía de paisano, cada uno dotado de su armas reglamentaria, virtudes y defectos y árbol de habilidades que iremos completando según ganemos experiencia.
Una vez elegido a nuestro “rompe-puertas” favorito, llega la hora de pasar a la acción. A través de un marcado estilo “pixel-art” como estáis viendo en las imágenes, deberemos limpiar cada habitación de terroristas, desactivar las bombas esparcidas por cada fase y liberar a todos los rehenes posibles. Door Kickers: Action Squad es un juego que busca el enfrentamiento indirecto, reventar (literalmente) al enemigo abriendo cada puerta y de esa manera comenzar un recital de disparos. Eso no implica que haya ciertos factores estratégicos, o una planificación previa antes de entrar a cada estancia. Podemos matar a los rehenes si disparamos “a lo loco” (tranquilos, con las primeras bajas civiles uno sufre, pero luego ya te acostumbras) o podemos morir abatidos rápidamente si somos emboscados por un grupo numeroso de enemigos. Manos mal que cada agente tiene un as bajo la manga…
Aparte de poder seleccionar nuestra arma reglamentaria, chaleco y tipo de granadas, cada uno de los seis héroes tendrá un árbol de habilidades que iremos desbloqueando según obtengamos la experiencia requerida. Eso no se queda ahí, ya que en el transcurso de cada misión iremos llenando un medidor que nos permitirá usar ciertos objetos que harán nuestro periplo mas asequible. Según recarguemos esta barra, los objetos a utilizar serán cada vez mejores, empezando por un chaleco antibalas, siguiendo por cajas de suministros, botiquines, la reaparición de nuestro compañero de escuadra, una vida extra, hasta acabar con la habilidad especial que cada agente tiene. No son aspectos estratégicos muy profundos, Door Kickers: Action Squad es lo que es, aunque se agradecen estos momentos de planificación previa y aprovisionamiento antes de liarse a tiros contra todo lo que se mueva en pantalla.
Pese a todo el elenco de personajes, armas variadas y objetos que se pueden equipar, hay un aspecto que echa por tierra todos los esfuerzos del estudio KillHouse Games en su juego. Ante nosotros tenemos un título muy repetitivo, hasta el punto de ver todas las fases con los mismos ojos. Todos los escenarios se comportan igual: puertas que patear (o ventanas que destruir), matar a los malotes de turno y poco más. No por tener 84 fases el juego es mejor. Casi que hubiese preferido tener la mitad, pero con enfoques diferentes, o ligeros cambios en sus mecánicas que justifiquen seguir jugando. Incluso en su modo cooperativo al cabo de una hora todo empieza a tornarse repetitivo, pese a la diversión que puede aportar el juego cuando se disfruta con un amigo.
Puede que de primeras Door Kickers: Action Squad nos resulte un juego interesante (no lo discuto, las risas en compañía están aseguradas), pero esa reiteración de fases puede lastrar la experiencia final. KillHouse Games ha intentado aportar variedad a su propuesta, y junto con el modo tradicional, tenemos otras dos variantes que casi diría que llegan a jugar en su contra. El primero de ellos se llama Torre Infinita y es un “endless-mode” donde tenemos que enfrentarnos a cientos de enemigos hasta que consigan tumbarnos. Nada nuevo bajo el sol. El segundo de ellos es Modo Invasión Zombie y como su nombre indica, tendremos que enfrentarnos a los mismos mapas y enemigos que en la aventura convencional con la única excepción de que existen portales por donde aparecen zombies con ganas de hacer el mal. Lo dicho, todo queda en un intento de sumar contenido, pero son propuestas tan parecidas a su vertiente principal que no habrá ningún tipo de incentivo adentrarnos en ellas.
Conclusión
Door Kickers: Action Squad entra al mercado con una propuesta firme y directa. Rescatar rehenes y neutralizar a los enemigos está genial, más aun cuando disfrutamos de todo el frenetismo con un amigo gracias a su cooperativo. Pero, pese a esa primera buena impresión inicial, luego todo se va tornando repetitivo debido a la ingente cantidad de pantallas parecidas que el título nos brinda. Acotar el número de fases, propiciar nuevas mecánicas, o introducir algún componente estratégico más elaborado le hubiesen sentado de maravilla a su fórmula jugable. Ojalá podamos ver una segunda parte mucho más profunda y que expanda todo el potencial que puede dar de sí la propuesta de KillHouse Games.
Door Kickers: Action Squad
14.99€
Pros
- Variedad de personajes para encarar las misiones
- Jugar en cooperativo es una pasada
- Humor en cada pantalla...¡Cuidado con las abuelas!
Cons
- Muchas pantallas y muy parecidas entre sí
- El juego pide a gritos un mayor componente estratégico
- Los otros modos de juego son demasiado parecidos a la propuesta principal
