Análisis de Agatha Christie: The ABC Murders

¡Se ha escrito un crimen! ¿O se ha adaptado un crimen? Mientras resolvemos el misterio puedes ir leyendo nuestro análisis de Agatha Christie: The ABC Murders.

Parece que la investigación está en boga estos últimos años, y títulos como Broken Sword 5: La Maldición de la Serpiente, las entregas de Sherlock Holmes o Murdered: Soul Suspect (entre otros) dan buena cuenta de ello. Es por eso que Microids, experta en este tipo de aventuras, no iba a dejar a pasar el tren  y para ello reflota un clásico de la literatura escrita por la célebre Agatha Christie para que los disfrutemos en nuestras consolas de actual generación.

Agatha Christie: The ABC Murders es el nombre del juego que hace referencia a la novela “El Misterio del Ferrocarril”, bastante conocida (y reconocida) por sus lectores. En esta aventura controlaremos a Hercules Poirot, el detective belga afincado en Londres creado por Agatha Christie, el cual estará siempre acompañado por su ayudante Arthur Hastings. Este rechoncho personaje, a diferencia de otros compañeros de profesión, utilizará la psicología y lógica humana antes que detenerse a analizar las pruebas de la escena del crimen. Con esta forma de trabajar deberá resolver los misteriosos casos que se suceden en torno a un asesino que firma todas sus cartas con las iniciales ABC. Hercules Poirot pronto se dará cuenta de que la firma del homicida está relacionada con la guía ABC de ferrocarriles, donde se especifican horarios, trayectos y ciudades de este medio de locomoción. Con esta premisa, y con la ayuda de su “Watson” particular, nos espera una historia que, evidentemente, contiene una buena narrativa, pero falla en otros aspectos que contaremos a continuación.

Si habéis jugado a Syberia o Still Life, ambos de Microids, más o menos sabréis lo que os vais a encontrar en Agatha Christie: The ABC Murders. Olvidaros del juego lanzado para Nintendo DS con el mismo nombre, aquí nos encontramos una aventura gráfica en la que tendremos que desplazar el cursor por el escenario para buscar pistas, detalles y elementos que ayuden en nuestra investigación. Un point´n click de toda la vida, vaya… Y aunque tengamos cierta libertad para investigar cada escenario como nos plazca, el principal problema que puede residir en esta aventura detectivesca posiblemente sea la linealidad que tenemos en toda la aventura, posiblemente obligada para seguir las pautas del libro y que nos lleva de la mano en todo momento.

Aparte de estas observaciones pertinentes, Hercules Poirot tendrá que realizar interrogatorios a los testigos y posibles sospechosos de asesinato. Aquí pasa una cosa muy curiosa, y es que los chicos de Microids han intentado, a su manera, reflejar los estados de ánimo de las personas interrogadas con un estilo parecido a la visto en L.A. Noire. Eso sí, Agatha Christie: The ABC Murders cuenta con un apartado gráfico bastante sencillo que no le permite reflejar las expresiones de los personajes de una manera acertada, por lo que recurrirán a palabras escritas en el aire para que sepamos sus emociones de una manera mas precisa. La mayoría de las veces tendremos varias opciones de pregunta, y tendremos que decidir cuál es más acorde según el estado psicológico del acusado, ya que a veces será mejor recurrir a la ironía, otras a la amabilidad, o ser más o menos  directos para sonsacar la información adecuada. Al final todo este desarrollo de preguntas y respuestas no tiene bastante transcendencia en la historia principal, pero es un gesto de agradecer el ir “un poco más allá” en los diálogos con los testigos y acusados.

Terminado de explicar los momentos de exploración e interrogatorios, ahora toca el turno de explicar las  mecánicas de deducción que se darán lugar en Agatha Christie: The ABC Murders. Para ello, y al igual que en las novelas protagonizadas por el detective Belga, contaremos con las pequeñas células grises que unirán evidencias y testimonios con las que avanzar en la aventura. Todos estos enlaces formarán parte de un mini-juego bastante sencillo, basado en prueba y error, donde usaremos los indicios averiguados para encontrar respuestas a esas cuestiones sin resolver.

Los puzles tampoco faltarán en el título de Microids, y no serán pocas las veces que nos topemos con rompecabezas en las investigaciones. Estos enigmas se basarán en la visualización de un objeto en el espacio, el cual podemos rotar para buscar las pistas necesarias, o en mecanismos que nos permitan acceder a su interior. Por citar ejemplos, nos encontraremos cajas que contienen segmentos deslizantes, palancas escondidas que activen otro mecanismo, búsqueda de códigos o encajar piezas en un tablero. Quizás sea la parte más desafiante de todo el juego, pero tranquilos, ya que si nos quedamos atascados tendremos un sistema de ayuda para que nos haga el camino más fácil.

Una vez realizado la exploración, los interrogatorios, halladas todas las evidencias y resueltos todos los puzles, llegará el momento de la reconstrucción. No esperéis nada espectacular, sino un “flashback” del momento del crimen donde tendremos que interpretar lo que pasó en el fatídico momento. Para ello, según se va narrando la escena, tendremos que pulsar un botón con la opción que creemos correcta para que todo se desenvuelva satisfactoriamente. De nuevo, el sistema de prueba y error vuelve a estar presente, lo que quita parte de la emoción y concentración por pensar bien la respuesta.

No podemos decir que Agatha Christie: The ABC Murders sea un mal juego, pero sí que es cierto que contiene ciertos elementos que no están a la altura. El apartado gráfico es lo primero, con unos personajes sencillos, casi sin expresión y con una nula sincronización labial con esa técnica de cell shading que ya hemos visto en tantos juegos hoy en día. Los escenarios  tampoco son lo que esperamos de este tipo de juegos, llenos de detalles y elementos para la investigación, sino que serán bastante austeros y con los elementos clave encima nuestra. La jugabilidad también tiene sus claros y oscuros, debido a la poca libertad que tenemos a la hora de explorar las localizaciones, así como el lento movimiento de Hercules Poirot, o la mala detección de los mecanismos en los enigmas que nos encontremos.

La apuesta sonora tampoco  es que sea para ser recordada, pero contiene pequeños matices que la hacen sencilla, pero resultona. Mientras que en algunos momentos este acompañamiento musical sea totalmente nulo, hay otras ocasiones que casan muy bien con la escena, como por ejemplo cuando entramos a un bar o cafetería. Lo mismo pasa con las voces de los personajes. Mientras que Hercules Poirot, Arthur Hastings o cualquier otro protagonista principal tienen un buen doblaje (en inglés, con acento belga por parte de nuestro detective), el resto de voces serán bastante vacías y llanas. Por suerte para nosotros, contaremos con el juego con textos en español, para que no perdamos detalles de la escena del crimen.

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