Avalanche Studios nos trae la segunda entrega de Just Cause, donde ya de por si la primera entrega sorprendió especialmente por la espectacularidad y “barbaridades” que podíamos hacer en el juego, esta segunda pretende superar al primero en todos los aspectos. ¿Lo habrá conseguido? Sigue leyendo y sabrás lo que opinamos de Just Cause 2.
Objetivo: Tom Sheldon
Todo el juego se basa en un fin bien claro, encontrar a Tom Sheldon, nuestro antiguo maestro en las artes de la infiltración donde todo indica que ha traicionado a toda la agencia con un plan realmente malévolo, sembrar el caos en la isla de Panau, un paraíso de más de 1000 km cuadrados que en realidad será nuestro gigantesco escenario que podremos circular por cualquier lugar de dicha isla.
Todo empieza de una forma algo caótica, tras un ataque desde el helicóptero que estamos se cae documentación “super secreta” del estado por lo que no tendremos otro fin que tirarnos junto a nuestro imprescindible paracaídas para recuperar dicha documentación (almacenada en memorias de PDAS).
Como he comentado nuestro objetivo y fin es encontrar a Tom Sheldon que se encuentra en algún lugar de la isla, para ello tendremos que hacer cosas que no nos gustará, como unirnos a bandas que irrumpen la isla para que nos lleven directamente a Tom. En otras palabras tendremos que trabajar para ellos.
La isla de Panau está dividida y controlada por diversas bandas que en su jurisdicción nos harán la vida imposible para aniquilarlos, por suerte contaremos con cualquier tipo de vehículo motorizado, desde un Quad, motos, coches hasta cazas, helicópteros y avionetas lo que hace que de por sí desplazarse por la gigantesca isla sea realmente divertido.
El juego se divide en misiones que se irán desbloqueando cuanto más caos provoquemos en la isla en la que poco a poco nos acercará a nuestros objetivos, a su vez entre estas misiones que se centran básicamente en ir a un sitio y conseguir algún objeto o aniquilar a una persona determinada se alternarán mini juegos como carreras por el aire entre otras.
El gancho de la muerte
El juego quiere transmitirnos una sensación total de acción y espectacularidad y lo consigue gracias a movimientos imposibles, ataques con gran cantidad de explosiones y gracias prácticamente a un accesorio que contará Rico Rodriguez (alias El Escorpión), un gancho extra largo cuya finalidad es variada, desde poder realizar ataques (enganchar a nuestros enemigos y echarlos al vacío) como subirnos a helicópteros, coches en movimiento y a edificios…. Y como no, usarlo para poder enganchar dos objetos para posteriormente desplazarlos o hacer cualquier cosa que se nos ocurra.
Está claro que si Avalanche Studios quiere transmitir mucha acción tenemos que contar con una gran cantidad de armamento, y es que nuestro arsenal será variado, desde granadas, C4, ametralladoras, pistolas, “trabucos”…. Aunque nuestro personaje, Rico, solo podrá llevar 3 armas a la vez y tiene la posibilidad de llevar en cada arma una pistola para poder realizar diversos disparos a la vez.
Podríamos destacar a su vez en el armamento algún que otro vehículo como helicópteros militares que están armados hasta las “trancas” o impresionantes cazas que sin duda cuando tengamos uno de estos se nos caerá la baba por la posibilidad de destrucción y caos que podremos realizar.
Un guión mejorado
El juego ha mejorado en todos los aspectos frente a su antecesor pero quizás sigue flojeando en dos apartados en los que en muchas ocasiones determinan un gran juego a ser un juegazo, hablamos de un guión que tenga coherencia, desde el primer momento en Just Cause 2 sabemos lo que hacemos en la Isla de Panau pero al dividirse en misiones parece que no goza de una continuidad como nos gustaría verlo, a su vez si a este aspecto acompaños las escenas “cinematográficas” bastantes flojas (gráficamente hablando) hace el juego se devalúe en este aspecto.
Por suerte este juego como la primera entrega la tendremos totalmente traducida y doblada al castellano, un aspecto importante para focalizar y centrarnos en la acción del juego y no en leer los subtítulos para enterarnos de la historia.
Lo Mejor
– Gran dosis de acción
– Totalmente en castellano
-Gráficamente es un juego bonito
Lo Peor
– Las escenas cinematográficas no están a la altura del resto del juego.
EVALUACIÓN DEL JUEGO
Gráficos
Prácticamente ya se ha hablado todo a lo largo de las anteriores líneas del análisis, pero resumimos de que gráficamente el juego nos transmite un entorno bonito pero a su vez espectacular gracias a la gran cantidad de acción que habrá en el juego, como explosiones, ataques etc… sin duda lo único criticable en este aspecto de gráficos son las escenas cinematográficas que no son ni mucho menos acorde con el juego en sí.
Jugabilidad
La palabra que define perfectamente la jugabilidad del juego es que es un juego divertido debido a la gran cantidad de acción (lo sé, me repito en exceso, pero es así), ataques imposibles, movimientos surrealistas y todo esto va acompañado gracias a un control no excesivamente complejo y en el que a los pocos minutos de jugar ya nos haremos totalmente con todos los movimientos de Rico Rodriguez.
Sonido
Solo decir que está totalmente en castellano ya es un punto positivo para el juego, a su vez está acompañado de un enriquecedor sonido de ambiente como pájaros, voces, radio etc que hace que nos sumerjamos totalmente en la Isla de Panau.
Conclusión
Si buscas un juego de mucha acción este es tu juego, te lo pasará en grande en este sandbox donde la libertad que nos ofrecerá la isla de Panau y la gran cantidad de misiones hará que pasemos bastantes horas delante de la pantalla viendo como destruimos y provocamos el caos en la Isla de Panau.
Ya lo sabes, enciende la Xbox 360 y disfruta de “La Jungla de Cristal” pero con distintos personajes y distintos escenarios, lo dicho, bienvenido a la isla de Panau, o mejor dicho, bienvenido a la isla del Caos ¡!
NOTA: 8,2
